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Los “gracias” del tiempo

¡HOLA!

 

Ya de regreso para estrenar un nuevo año juntos. El tiempo y esa terrible percepción de que vuela ¿no? Quizá, bastante afectada por la lógica de las redes sociales, a veces siento que el tiempo pasa rápido pero mide milimétricamente aquellos que transcurre cuando pasa. Sino… ¿cómo explicarle a Facebook y sus épicos “Un día como hoy” que esa de la foto soy yo apenas un año antes?

 

Lo cierto es que mis vacaciones estuvieron ¡fantásticas!Si bien hace mucho que tengo la sensación de no necesitarlas, cambiar la dinámica diaria, aunque sea en casa, siempre es un modo de aprender a mirar mi cotidianeidad de un modo más objetivo. Sólo saliendo del automático es posible valorar el camino recorrido y aquellas cosas que deseamos modificar.

 

Mi objetivo fue poder dedicarles el mes de enero a mis hijos y nietos. Asique desactivé todo contacto tecnológico con el mundo y gracias al formidable equipo de personas que me acompaña, pude sumergirme en el mundo de los analfabetos digitales. Sin computadora y sin celular la morfología de mi departamento comenzó a transformarse. Santi llegó para quedarse sin fecha de vencimiento y el tender del balcón fue invadido por remeras y bermudas talle 10. Los juguetes brotaron de los lugares más insólitos y por primera vez no solo cuidé a Santi sino también a su hermanita Bianca.

 

El despertador de la mesa de luz fue a parar al cajón y junto al velador habitaron varias novelas, entre ellas una de la que ya hablaremos en mis próximas columnas: “Memoria de mis putas tristes” de Gabriel García Márquez.

 

Las persianas se levantaban a media mañana, el desayuno fue casi un almuerzo y las tardes no tenían fin. La ciudad se transformó en una desconocidaque deseábamos recorrer y cuando ya nos habíamos acostumbrado a las meriendas a la vera de la pileta del club, me sumé junto a la familia de mi hija a un viaje improvisado a la costa.Viajé en el asiento trasero junto a mis dos nietos ¡casi que no quepo de la alegría! Es por eso que quiero iniciar este 2018 agradeciendo, porque en el agradecimiento habita la forma más hermosa de concretar nuestros deseos; el valor más preciado por la vida; el cuidado de los otros; la confianza en la fuerza del equipo y la solidaridad hasta en las más sencillas acciones. Fue por todo aquello que obtuve esto:

 

• Mis atardeceres en el mar con Bianca dormida en mi regazo,

• Las vacaciones en paz, compartidas con mi hija y su familia,

• Mis novelas ávidas de ser disfrutadas,

• Las ojotas y el pareo cómo único atuendo,

• La ida al cine junto a Santi para disfrutar juntos de “Coco”,

• El despertador dormido,

• Los celulares silenciados,

• La ropa sin lavar,

• El polvillo que puede esperar,

• Las mañanitas frescas en el mar,

• El desdibujamiento de horarios y esa entrega a la nada misma.

Todo, todo, todo esto pudo ser posible gracias a muchas personas.

 

Deje el mundo y me di cuenta que nada sucede en mi ausencia. Casi sucumbo ante la tristeza narcisista y me alegré al darme cuenta que la única que debe asustarse de estar ausente, soy yo.

 

¿Recorremos otro año más juntos?

 

¡Bienvenido 2018 y gracias!

 

Porota

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Por si aún no lo viste 

Durante todo el mes de enero estuvimos compartiendo en mis cuentas de Facebook e Instagram historias de personas mayores dispuestas a disfrutar de su presente con audacia y humildad; escuchando sus deseos y accionando en favor de ellos. ¿Ya viste el corto de #viejostemas que le hicimos a Chicha Osorio, una referente de la moda y el estilo de Córdoba?

 

O a lo mejor te interesa la nota que compartimos de Juan Savio. Un hombre de 80 años que dicta cursos de informática básica para personas mayores. También compartimos en nuestras redes la nota que habla de la agencia de modelos rusa que ya cuenta con 20 modelos entre 45 y 86 años en su staff. Imperdibles son también las historias de una abuela que se aventuró junto a su nieto a escalar el Aconcagua; o la de los viejos tatuados; o la hermosa anécdota de Peggy que a los 101 años pinta no solo con pinceles y acuarelas sino también en la tablet. Te invito a que entres a mi Facebook (porotavida)e Instagram (@porotavida) o a mi página web (www.porotavida.com) y disfrutes de hallarte también vos en esas personas que abrazan sin miedo la edad.

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